jueves, 5 de junio de 2014

Lope de Vega, una vida de pasiones

        Félix Lope de Vega Carpio, conocido como el Fénix de los Ingenios, nació en Madrid en 1562. Se ha dicho que sus padres procedían de la Montaña santanderina, pero no eran nobles. El hecho de tener una ascendencia montañesa, como tanto parece gustarle recalcar a Lope, lo avalaba como cristiano viejo. Aunque ha habido estudiosos que han hablado de la posibilidad de que nuestro autor fuera de origen converso y de ahí la insistencia en recalcar su procedencia del Valle de Carriedo.

    Lope de Vega tuvo una vida intensa y pasional, propia de su carácter vitalista y extrovertido, que encontró fiel  reflejo en su obra.
   La familia de Lope se instaló en Madrid, donde el poeta asistió al estudio de Vicente Espinel. Lope debió ser un prodigio y completo sus estudios en los jesuitas. Tras esta primera formación inició sus estudios universitarios en Alcalá, pero no llegó a concluirlos por culpa de unos amoríos juveniles.
     Después de sus años de formación, el poeta participó en alguna expedición militar. Cuando regresa, Lope entró en contacto con Elena Osorio, hija del autor Jerónimo Velázquez. Las relaciones de Lope y Elena (Filis en los romances pastoriles y Zaida en los moriscos) fueron conflictivas. Elena estaba casada y parece ser que Lope pagaba las relaciones íntimas que mantenía con ella entregando comedias a su padre. El motivo de su ruptura fue que Elena, libremente o por imposición familiar, comenzó a mantener relaciones con hombres más ricos y poderosos que nuestro poeta.
     Los amores con Elena Osorio y la posterior ruptura aparecen reflejados en un gran número de textos literarios entre los que destaca la obra teatral Belardo el furioso.
   Tras romper con Elena, Lope compuso una serie de sátiras contra los Velázquez, razón por la cual los familiares de Elena se querellaron y Lope fue a parar a la cárcel de donde salió condenado a ocho años de destierro de la corte y dos del reino.
    Al salir de la capital se lleva raptada, con el consentimiento de ella, a Isabel de Urbina, con la que se casará por poderes. El matrimonio se instalará en Valencia, atraído posiblemente por la intensa vida teatral de esta ciudad. Será en esta ciudad donde se fragüe la nueva comedia que dará fama atemporal a nuestro poeta. Lope escribía sus comedias que enviaba a Madrid a Gaspar Porres, empresario que sustituyó a los Velázquez tras haber reñido con estos. Por estos años comienzan a ser reproducidas como anónimos los romances de nuestro poeta en las Flores de poetas ilustres y en cancioneros.
     En 1590 se instaló en Toledo donde entró al servicio del duque de Alba y con él se trasladaría a Alba de Tormes donde vivió los 5 años que estuvo a su servicio. En 1594 murió Isabel Urbina y un año más tarde Lope consiguió que los Velázquez retirarán la demanda y los perdonarán, pudiendo así volver a Madrid. En 1596 es procesado por amancebamiento con Antonia de Trilla.
    En 1598 Lope de Vega se casa con Juana de Guardo, pero a la vez mantiene relaciones con Micaela de Luján (la Camila Lucinda de sus obras), famosa comedianta de la época, que estaba casada. En 1603 murió el marido de Micaela, pero ella y Lope siguieron atribuyéndole los hijos que engendraban en su relación amorosa.
      Lope vivió con Micaela en Sevilla, mientras tenía su casa oficial en Toledo donde estaba Juana de Guardado.
     A partir de 1608 parece romper con Micaela con la que había tenido 5 hijos de los que sobrevivieron dos: Lope y Marcela. Por su parte, con Juana de Guardo tuvo dos hijas de las que se sabe poco, y un hijo, Carlos Félix.
    En 1610 Lope de Vega se instaló en Madrid donde vivirá el resto de sus días. En 1623 mueren Carlos Félix, su hijo predilecto, y Juana de Guardo. Estas muertes le provocaron una honda crisis espiritual que le llevó a ordenarse sacerdote en 1614.
   Desde 1605, Lope servía como secretario al duque de Sessa en sus aventuras amorosas. El poeta escribía las cartas para las amantes de su señor y andaba los pasos para conseguir los favores amorosos que el duque por sí solo era incapaz de obtener.
   En 1616, nuestro poeta mantendrá relaciones con Marta de Nevares, llamada en los poemas Marcia Leonarda o Amarilis. Marta tenía veintiséis años cuando la conoció, y estaba malcasada desde los trece años. La pasión entre el sacerdote y la joven fue tan turbulenta y arrebatada como acostumbraban a ser todas las de Lope. De esas relaciones nació una hija: Antonia Clara.
      Marta enfermó de los ojos antes de 1623 hasta quedarse completamente ciega. Además en 1628 empezaron a darle ataques de locura que desaparecieron más tarde. Marta murió el 7 de abril de 1632.
      Los últimos años de Lope están marcados por las estrecheces económicas y por la progresiva soledad. Murió el 27 de agosto de 1635 y el duque de Sessa costeó su entierro y las honras fúnebres que duraron nueve días.
         

No hay comentarios:

Publicar un comentario